¿Qué es la obesidad mórbida?

La obesidad mórbida significa que una persona tiene tanto sobrepeso que su bienestar y salud están en peligro. Se define de varias maneras diferentes:

  • Un Índice de Masa Corporal (IMC) igual o superior a 35 Kg/M2 en una persona que tiene problemas médicos asociados como presión arterial alta, apnea del sueño o diabetes. El IMC relaciona el peso de una persona con su estatura en un intento de generar un denominador común para todos los individuos.
  • Un Índice de Masa Corporal (IMC) igual o superior a 40 Kg/M2 en una persona que tenga o no otros problemas médicos. Utilice una calculadora de IMC para determinar su IMC.

Los pacientes que son considerados obesos mórbidos tienen una probabilidad significativamente más alta de tener lo siguiente (en comparación con los individuos que no tienen sobrepeso):

  • Morir prematuramente – los individuos con obesidad mórbida tienen una probabilidad 300-500% mayor de morir antes de los 76 años de edad.
  • Desarrollar problemas médicos incluyendo diabetes (1200% más alta), presión arterial alta (500-600% más alta) y enfermedades cardíacas (200-400% más alta).
  • Desarrollar ciertos tipos de cánceres como el de colon, mama y útero.
  • Desarrollar artritis degenerativa prematura y dolor en las articulaciones que causan movilidad y actividad limitada.
  • Desarrollar apnea del sueño e hipertensión pulmonar (que conduce a la insuficiencia cardíaca).

¿Por qué la cirugía para bajar de peso?

En general, los pacientes que pueden perder peso por medios convencionales o no quirúrgicos deben hacerlo en lugar de someterse a una cirugía bariátrica con la cirujana bariátrica Dra. Ana García Navarro. Desafortunadamente, sólo entre el 3 y el 5% de las personas que siguen una dieta logran perder peso y mantenerlo a largo plazo.

La cirugía es un método muy efectivo y exitoso para lograr una pérdida de peso a largo plazo. Un grupo de expertos médicos convocados por el Instituto Nacional de Salud emitió la declaración de que, «Sólo la cirugía ha demostrado ser eficaz a largo plazo como tratamiento para la obesidad grave y debe ser considerado el estándar de atención para todos los pacientes que han fracasado los intentos dietéticos de pérdida de peso».

La cirugía tiene más riesgo que la dieta; sin embargo, en manos de un cirujano experimentado, los riesgos de la cirugía son menores que los riesgos a largo plazo para la salud y la longevidad causados por la obesidad.